Para discurrir con acierto sobre esta cuestión(como sobre otras muchas de tipo políticoy religioso) hay que partir del principio deque tanto la Iglesia como el Estado no son finen sí mismos sino medios al servicio de laspersonas. Admitir este principio referido alEstado parece bastante evidente, no lo estanto para muchos referido a la Iglesia.
... Seguir leyendo